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mayo 4, 2021

Rechazan asesinato de tres mujeres en menos de 72 horas en La Guajira


En menos de 72 horas y en tres hechos, al parecer aislados, fueron asesinadas tres mujeres en el departamento de La Guajira.

Dos de las víctimas son origen wayuu y una migrante venezolana, lo que ha generado el rechazo de diferentes sectores.

El primer caso reportado, la mañana del jueves 29 de abril, fue el de Blanca Irene Pirela Osorio, de 47 años, de nacionalidad venezolana y residenciada desde hace unos tres años en el municipio de Albania. Le sobrevive un hijo de 7 años.

Su cuerpo fue encontrado en un sector enmontado en inmediaciones del corregimiento de Ware, con varias heridas de arma de fuego.

De acuerdo a lo que se pudo conocer, Pirela había estado trabajando en algunas instituciones educativas de este municipio y vivía en una invasión en los alrededores de Albania, trasladando su sitio de residencia a una comunidad indígena wayuu cercana.

El segundo hecho registrado fue dado a conocer la noche del viernes luego de que la Policía fuera alertada del cadáver de una mujer al interior de un motel ubicado en la comuna 10, un populoso sector de Riohacha.

La víctima fue identificada como Luz Dari Cotes Ballesta, de origen wayuu, quien al parecer murió por asfixia mecánica.

Su cuerpo fue encontrado en una cama boca abajo sin heridas, con unos moretones en el cuello y el rostro.

Cotes, de 39 años, natural de Albania, era trabajadora social y madre de una menor de 7 años.

Sobre este hecho, la administración Distrital ofreció 10 millones de pesos de recompensa para quien suministre información que permita dar con los responsables.

El tercer caso, ocurrió el sábado en horas de la tarde, en zona rural de Fonseca, en la vía que de esta localidad conduce al corregimiento de El Hatico, en la zona conocida como “El Malecón del río”.

Transeúntes del sector reportaron el hallazgo del cuerpo de una mujer con el torso desnudo, debajo de un puente, sin ninguna clase de heridas.

Se trataba de una menor indígena wayuu de 17 años, residente en el resguardo indígena Trupio Gacho, en jurisdicción del municipio de Barrancas.

Shadi Silva Santos, coordinadora de la oficina de mujeres de la ONG de derechos humanos Nación wayuu, se pronunció sobre la muerte de las dos mujeres de esta etnia, pidiendo a las autoridades resultados contundentes que den con la captura de los responsables de estos crímenes.

“Siendo la última una menor de edad, la cual fue hallada violada, torturada y asesinada debajo de un puente en el municipio de Fonseca. Estos feminicidios atentan contra el derecho de la mujer wayuu como símbolo de vida”, dijo Silva.

El Colectivo de Mujer Wayuú solicitó una ruta de atención con enfoque diferencial, en un encuentro virtual con la ONU Mujeres, Unicef, Unfpa y la Defensoría del Pueblo, en el que visibilizaron estos casos y uno de trata de una joven wayuú que se encontraba en poder de una banda en Boyacá.

Por su parte, la directora de Mujer, Juventud, Infancia y Adolescencia de Riohacha, Karen Gómez, repudió el asesinato de Luz Dari Cotes y pidió a las autoridades esclarecer los hechos, al tiempo que rechazó las estimaciones realizadas en redes sociales.

“No es justo que las mujeres víctimas además de cargar con golpes, malos tratos y en el peor de los casos la muerte, tengan que enfrentarse a la revictimización al ser expuestas públicamente”, dijo Gómez.

Mientras que el cabildo gobernador del resguardo indígena de Trupio Gacho, Víctor Epiayú Molero, rechazó el asesinato de la menor.

“Este feminicidio del que fue víctima una joven miembro de nuestro resguardo, nos tiene consternados no solo al pueblo wayuú, sino a todos los pueblos indígenas de Colombia y del mundo, porque la mujer representa para nosotros la vida, la continuidad como pueblo wayuú”, indicó el cabildo gobernador.

También pidió la realización de un consejo de seguridad con los alcaldes de Fonseca, Barrancas, Fiscalía, Procuraduría, Defensoría del Pueblo, autoridades tradicionales del resguardo de Trupio Gacho y miembros de la Asociación de Cabildos, para dar con los responsables.

Eliana Mejía Ospino 
Especial para EL TIEMPO
Riohacha 

FUENTE: EL TIEMPO


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