octubre 20, 2020
Minga y Duque: ¿un encuentro empantanado?
Indígenas, estudiantes, campesinos y comunidades afros, que forman parte de la Minga del Suroccidente, se concentraron este lunes en la Plaza de Bolívar para insistir en una reunión con el primer mandatario. Comisionado de Paz viajará al Cauca para reunirse con autoridades del CRIC.
Con la movilización de casi 8 mil integrantes de la Minga del Suroccidente, que caminaron este lunes desde el Palacio de los Deportes hasta la Plaza de Bolívar, volvieron las marchas a la capital del país. Encabezados por un cordón de seguridad de la Guardia Indígena, que portaba sus bastones de mando, la minga recorrió desde la calle 63 hasta la avenida 30 (NQS), de ahí marchó pacíficamente a lo largo de la avenida El Dorado hasta la carrera 7ª, para llegar finalmente al centro de Bogotá con el propósito indeclinable de buscar una reunión con el presidente Iván Duque. Al final de la jornada, y sin haber obtenido una respuesta del Gobierno, la minga terminó haciendo un juicio espiritual y político, ante la ausencia del mandatario.PUBLICIDAD
Sobre la posibilidad de un encuentro hay más dudas que certezas, pues desde el Gobierno han insistido en que el planteamiento que ha hecho la minga, de hacer un debate político al primer mandatario, es un obstáculo, pues dicen no puede haber ultimátum y que primero se deben establecer reglas claras y protocolos sobre los temas que se abordarán en un eventual encuentro.
“Este Gobierno tiene como prioridad que los acuerdos que se firmen se cumplan. Por eso la necesidad de establecer claramente cuáles son los puntos de la minga. Ir focalizando las peticiones, para definir quiénes son los encargados y la viabilidad de las propuestas”, señaló la ministra del Interior, Alicia Arango, quien ha insistido en varias oportunidades en que esta no es una movilización reivindicativa, sino política.
Incluso el mismo mandatario se refirió este lunes al tema y aunque no mencionó directamente a la minga, sí hizo énfasis en que no son aceptables fechas límites en la búsqueda del diálogo: “Si tenemos discusiones, démoslas en el marco de la democracia, sin que tenga que haber emplazamientos ni invocar juicios que no tienen asidero”.
Entretanto, el alto comisionado para la Paz, Miguel Ceballos, reveló que viajaría al departamento del Cauca a encontrarse con las comunidades indígenas que forman parte del CRIC (cuyas principales autoridades están precisamente en Bogotá), para cumplir con unos encuentros y compromisos establecidos antes de que comenzara la minga.
Para Víctor Moreno Mina, autoridad del consejo comunitario Pandao e integrante de la Asociación de Consejos Comunitarios del Norte del Cauca, es importante entender que la minga viene exigiendo la reunión con el presidente Duque desde el año pasado en esos territorios étnicos y campesinos que tienen profundas condiciones de vulnerabilidad. “Esto que está pasando ya es una ganancia. Hoy la minga ha logrado posicionar nuevamente la movilización social y la necesidad de que el pueblo colombiano se pronuncie pacíficamente para reclamar sus derechos”.
Moreno señala que la opinión pública y el respaldo de diferentes sectores de la sociedad ha cumplido un papel importante para la exigencia de los derechos y que no es momento de detener la lucha: “No sé si el presidente Iván Duque vaya a seguir en esa arrogancia, que cada vez lleva más al abismo al país y deslegitima este Gobierno, al que no le importa lo rural, lo urbano y lo comunitario, sino que solo le importan las grandes corporaciones y empresas que hay en el país. Quizá Duque decida no sentarse con la minga, pero creo que el país gana, porque esto despierta conciencia, sentimiento de patria y ojalá esto siga creciendo”.
En ese mismo sentido la alcaldesa Claudia López señaló que es necesario que el país escuche a la minga e instó al Gobierno a concertar una solución. “Le reitero el llamado al Gobierno Nacional y al señor presidente de la República para que escuche a la minga y sus legítimas demandas. La minga y el Gobierno cuentan con Bogotá para facilitar cualquier proceso de diálogo y concertación que quieran llevar a cabo”, señaló la mandataria distrital.
Desde la Alcaldía también insistieron en que la jornada pacífica de este lunes tiene que ser la base para la manifestación que se realizará mañana miércoles, en el marco del paro nacional. “Esto es un ejemplo de movilización que permitió que funcionara el sistema de transporte masivo sin ningún traumatismo, a pesar de ser miles las personas que se movilizan. La Guardia Indígena ha hecho un gran trabajo controlando pequeños casos en los que algunos violentos intentaron sabotear una jornada enormemente pacífica. Que esto sea ejemplo para todos aquellos que quieren hacer sentir su voz. Que no es con violencia como pueden hacerse sentir ni escuchar, es justamente con expresiones de paz que se pueden lograr transformaciones”, señaló Luis Ernesto Gómez, secretario de Gobierno de Bogotá.
Luis Fernando Ocampo, indígena que participa en la movilización, aseguró que la manifestación seguirá siendo pacífica y abierta al diálogo. “Aquí todos tenemos que ir con tapabocas y nada de cubrirse el rostro, porque para nadie es un secreto que están estigmatizando la movilización diciendo que somos vándalos. Vinimos en busca de un diálogo y no a confrontar con nadie”, puntualizó.
FUENTE: EL ESPECTADOR