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julio 10, 2020

Están listas… y poniendo agenda feminista en el departamento con más feminicidios


#EmergenciaNacionalPorFeminicidios es la etiqueta que hace dos semanas se está moviendo en redes para pedir decretar crisis humanitaria por los feminicidios y también la violencia contra la mujer que, en medio de la pandemia por el covid, se ha disparado, como lo alertan varias organizaciones y lo evidencia el Observatorio Colombiano de las Mujeres de la Vicepresidencia.

Puntualmente, el numeral en Twitter busca que personas de todo el país firmen una declaración en la que piden que Presidencia declare la crisis humanitaria por esa situación, y lo ideó y promueve Estamos Listas, el primer movimiento político de mujeres de Colombia que logró poner a una concejala en Medellín llamada Dora Saldarriaga, cuya gestión funciona como una concejalía colectiva, en la que sus compañeras de movimiento y ella toman juntas decisiones desde la curul; como la que tomaron hoy de retirarse de la coalición de Gobierno y declararse independientes. ¿Cómo funciona la curul en el Concejo colectiva de Estamos Listas?

Esa campaña hace parte de la agenda feminista que el movimiento ha puesto en Medellín, una ciudad que tiene a su alcalde Daniel Quintero bajo sospecha, luego de que le aparecieran en redes unas acusaciones por presunto acoso sexual; y que es la capital del departamento donde han sucedido más feminicidios en el país este año, según el Observatorio Feminicidios Colombia, y que históricamente comparte ese penoso primer lugar con el Valle del Cauca. 

Su agenda va desde meterle la perspectiva de género a los proyectos del Alcalde en el Plan de Desarrollo, hasta el eco que le hacen desde el Concejo y por redes sociales a todo tipo de violencia contra la mujer. 

Este es el camino que han recorrido en sus primeros seis meses con curul.  

La agenda feminista que llegó al Plan de Desarrollo de Medellín

Desde que ganó Dora Saldarriaga, la número uno en el tarjetón de Estamos Listas, el movimiento comenzó a prepararse para incidir en el Plan de Desarrollo que será la ruta de acción de la Alcaldía de Daniel Quintero estos cuatro años. 

En esa vía, cinco días después de terminadas las elecciones regionales el año pasado, el movimiento invitó a su sede a Quintero y a la primera dama Diana Osorio para hablar de la visión de ciudad de ambos y en qué coincidían. Antes de terminar el año, se declararon en coalición de Gobierno junto con la mayoría de concejales de Medellín. 

Esa decisión, según dijeron en su momento, fue por “la necesidad de tener poder real para garantizar los temas de nuestro manifiesto en el Plan de Desarrollo”, como lo dijeron en sus redes.

Un manifiesto que Estamos Listas hizo en campaña y en el que se comprometen  principalmente a defender los derechos de la mujer, a generar acciones para erradicar la violencia de género y para reducir y redistribuir el trabajo no remunerado realizado por mujeres; y a promover cambios en la educación sexual en escuelas y mecanismos de cuidado y protección de las niñas, niños y adolescentes.

Bajo esa línea, este año arrancaron conformando 13 mesas técnicas con mujeres del movimiento y otros ciudadanos para recoger y armar propuestas para ese Plan. Cubrieron distintos temas como seguridad, economía, medio ambiente y educación, y a todos les pusieron la perspectiva de género, enfocándose en las necesidades de las mujeres y la población LGTBI. 

Luego, según nos contó la secretaria de Mujeres de Medellín, Juliana Martínez, desde que comenzó la construcción del Plan, “por instrucción directa del Alcalde, gestionamos citas entre Estamos Listas y otras secretarías para que pudieran plantear sus perspectivas y su agenda de mujeres”. 

La concejala Saldarriaga tuvo reuniones con los secretarios de Seguridad, Educación, Salud, Inclusión Social, entre otros, les entregó propuestas y les preguntó si sus proyectos tenían indicadores para diferenciar el acceso de ofertas entre mujeres y hombres, o que estuvieran dirigidos a cerrar esas brechas de desigualdad de género.  

Después, cuando Quintero le entregó el Plan al Concejo para debates y votación, Estamos Listas comenzó una campaña para exigir más presupuesto para la Secretaría de las Mujeres y le mandó más de cien enmiendas a la Alcaldía para que incluyera propuestas propias. 

Todo eso lo hicieron de la mano de la Mesa de Trabajo Mujer de Medellín, un espacio de interlocución con la Administración que existe hace 25 años y que reúne a 12 organizaciones de mujeres de la ciudad que buscan incidir en las políticas públicas. 

“Montamos un plan de una semana de ‘operación Sirirí’, como lo llamaría Fabiola Lalinde (víctima del conflicto armado), pidiendo por todos los medios 80 mil millones de pesos. Estamos listas presionaban desde adentro en el Concejo y la Alcaldía, y nosotras desde afuera”, nos contó Teresa Aristizabal cofundadora de la Mesa y fundadora de la Ruta Pacífica de Mujeres. 

Aristizabal nos contó también que con Estamos Listas pactaron cuáles serían los proyectos bandera que tanto ellas como movimiento político, como el movimiento social de mujeres, le iban a exigir a Quintero. Y coincidieron que sería el sistema municipal de cuidado.

Esa es una bandera que los movimientos feministas llevan años construyendo, no solo en Medellín sino en otras ciudades del país como Bogotá y Cali, y consiste en que los trabajos asignados culturalmente a las mujeres (como cuidar a los niños, ancianos, hacer el aseo en casa, entre otros) sean remunerados, reducidos y redistribuidos. 

Finalmente, luego de votar negativo el Plan en el primer debate del Concejo, y con la presión que generaron en redes y debates públicos, Estamos Listas logró cambios que la Alcaldía anunció un día antes de la votación final.

Los dos logros más visibles fueron el presupuesto de la Secretaría de la Mujer que pasó de 52 a 89 mil millones de pesos (el mayor que ha tenido en la historia); y que el sistema municipal de cuidado quedara como un indicador dentro del programa ‘Autonomía económica para las mujeres y su incorporación en el Valle del Software’, en la línea estratégica de Medellín me cuida.

En el indicador, la Alcaldía se compromete a diseñar ese sistema con enfoque de igualdad de género y derechos. Según la senadora Ángela Robledo, que también promueve ese proyecto desde el Congreso y fue una de las fundadoras de la Mesa Intersectorial de la Economía del Cuidado a nivel nacional, que las alcaldías incluyan ese proyecto en sus planes, aunque apenas es una base, “es algo completamente nuevo que nunca antes había sucedido”. 

Claudia López en Bogotá y Jorge Iván Ospina en Cali también incluyeron al sistema municipal de cuidado en sus planes como petición de movimientos feministas de esas ciudades. 

Estamos Listas también logró ponerle su sello a otros proyectos. 

En seguridad, por petición de ellas, incluyeron una atención diferencial a la población LGTBI en la línea de emergencias 123 (además de la 123 general, existe Agencia Mujer que atiende solo a mujeres); un protocolo para la prevención de feminicidios (el protocolo que existe es para homicidios en general); y la creación de dos comisarías especializadas para atender las violencias contra las mujeres. 

“En principio les dijimos que todas las comisarías tenían ese enfoque, pero ellas querían dos que solo fueran para mujeres y accedimos a eso”, nos contó el secretario de Seguridad José Gerardo Acevedo refiriéndose a las peticiones de Estamos Listas. 

En educación le metieron la incorporación de un protocolo de acoso sexual y de la perspectiva de género en los Proyectos Educativos Institucionales PEI, que son la ruta de acción de las instituciones educativas públicas.

Y en el Valle del Software, la gran bandera del Alcalde, pidieron que los proyectos de formación y generación de empleos tuvieran distribución paritaria; aunque eso no se logró, la Alcaldía desagregó algunos indicadores, por ejemplo, el de inserción laboral que beneficiaría a 12 mil personas, el 46 por ciento serían mujeres.

En otras cosas no tuvieron éxito. Por ejemplo, no cuajó la propuesta de la concejala de desarrollar un software para hacerle un seguimiento en tiempo real a las medidas de protección para prevenir la violencia intrafamiliar y los feminicidios. 

En todo caso, hasta ahora, esos logros solo están en el papel; y por eso, luego de haber aprobado el Plan, Estamos Listas creó más de 10 comisiones para hacerles control político a esos programas y seguir de cerca la implementación y ejecución de las políticas de género. Además, este semana decidió salirse de la coalición de Gobierno y declararse independiente, por sus diferencias con la Alcaldía, como contamos en este hilo.

Pero más allá de que la Alcaldía cumpla o no, la presencia del movimiento en el Concejo ha puesto sobre la mesa una agenda que organizaciones feministas de la ciudad llevaban años construyendo pero sin llegar a un espacio con más incidencia en el poder y las decisiones políticas, como ahora. 

“Hasta a un debate de infraestructura, Dora pone el tema de inclusión de las mujeres. Uno a veces no alcanza a hacer la conexión entre esos dos temas, pero ella expresa que cuando se hace una obra se tiene que pensar en la seguridad para ellas, una arista que el sector público no suele pensar; y así con muchos otros temas”, nos contó el concejal uribista Alfredo Ramos.

Y en eso coincidió un concejal conservador y un concejal liberal, “han habido muchas mujeres que defienden sus derechos, pero nunca una con una postura feminista tan evidente como Dora”, nos dijo el liberal Fabio Rivera que lleva 17 años en el Concejo. 

Esas discusiones dentro del Concejo también le han dado más fuerza a los debates de desigualdad y de violencia contra mujeres en redes sociales y espacios públicos.

Por ejemplo, antes de que llegara el covid, mujeres del movimiento llegaban hasta el lugar de la ciudad donde ocurría un feminicidio y se manifestaban por redes para hacerlo más visible.

Luego, en medio de la pandemia, han estado pendientes de las trabajadoras sexuales y de las vendedoras informales del centro, incluso, dentro del movimiento recogieron más de cinco millones para apoyar a las tradicionales vendedoras de tinto del Parque Berrío.

Y en medio de la declaración de emergencia nacional por feminicidios que arrancó el 19 de junio, convocaron manifestaciones en las calles para hacer más eco; además de buscar articularse con mujeres en otras ciudades. 

“En medio de movilizaciones espontáneas en varias ciudades por feminicidios, Estamos Listas nos buscó para articularnos en una petición a nivel nacional, y la idea es esa, trabajar juntas en la agenda de mujeres”, nos dijo la concejala del Polo en Cali Ana Erazo, quien hace parte del colectivo Mujeres en Movimiento. 

A la fecha, el documento con la declaración lleva más de seis mil firmas desde 30 departamentos, la han promovido con entrevistas a congresistas como Ángela María Robledo y Maria José Pizarro de los petristas, e incluso, la concejala se reunió con la consejera presidencial para la Equidad de la Mujer Gheidy Gallo para mostrarle la declaración y poder tener eco en Presidencia, sin mucho éxito, según nos contó Saldarriaga. 

Aunque la historia muestra que no será fácil que el presidente Iván Duque le preste mayor atención a la propuesta de Estamos Listas, pues ya han habido otros intentos, como el que lideró en 2015 Ángela María Robledo desde el Congreso y la Casa de la Mujer, que, aunque recogió siete mil firmas, no logró que el entonces mandatario Juan Manuel Santos las escuchara.  

Sin embargo, esa campaña y el espacio que han logrado abrir en el Concejo para hablar de las mujeres y sus necesidades, muestra que apenas en su primer semestre Estamos Listas está cumpliendo con su propuesta de campaña y sentando un precedente en la ciudad como movimiento político de mujeres.

FUENTE: https://lasillavacia.com/


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