mayo 19, 2020
El feminismo abolicionista
El feminismo, desde su nacimiento, en el siglo XVII en Francia, ha pasado por varias etapas, olas, corrientes y autoras alrededor del mundo, se ha asociado con movimientos políticos de izquierda, como el socialismo y el comunismo. Lo que provocó que el feminismo se diversificara en distintas corrientes ideológicas, significando más que solo la emancipación de la mujer.
Entre sus corrientes resaltan, además del feminismo socialista, el feminismo radical, el feminismo abolicionista –que ya ha ganado reconocimiento–, el feminismo de la igualdad, el de la diferencia y el ecofeminismo, además del feminismo institucional, que generalmente es un feminismo liberal y con orígenes ideológicos postmodernos, y que lo asumen quienes se quieren sentir progres y en onda.
El feminismo abolicionista en sus inicios luchaba por la abolición de la prostitución y de la pornografía, la situación mundial nos obligó a añadir el alquiler de vientres, o sea abolir la explotación sexual y reproductiva de las mujeres. Sin embargo, los intentos de la ideología de las identidades que intenta borrar al sujeto político del feminismo, las mujeres, nos ha obligado a incluir en nuestra agenda la abolición del género.
Y no cabe duda que las funcionarias que tiene en su gabinete el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, no han podido parar la violencia contra las mujeres y sólo dan palos de ciego, presentando folletos y campañas como “No estás sola”, entre ellas la Secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, Nadine Gasman, Presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres (INMUJERES), Candelaria Ochoa, Directora General de la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres (CONAVIM), quienes impulsan el reconocimiento de la prostitución como trabajo y que también impulsan los vientres de alquiler, ahora nos despertamos con una noticia en MSN Noticias, titulada “Niño o niña trans deben ser reconocidos por el Estado”.
Y la noticia dice que tras refrendar el compromiso del Gobierno de México contra toda discriminación por orientación sexual e identidad o expresión de género, la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero pidió al Poder Legislativo avanzar en las normas legales que otorguen mayores derechos a quienes integran este sector de la sociedad, incluso desde que son menores de edad. Lo que es brutal, cuando la que habla fue Ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, cuando nuestro derecho civil establece que en el caso de niñas y niños hay vicio en el consentimiento.
Y la Convención de los Derechos de la Niñez, que si bien establece derechos humanos para los niñas desde el nacimiento, también establece obligaciones para su cuidado y desarrollo, ya que hay derechos que van adquiriendo conforme se desarrollan, pero además le da la obligación subsidiaria al Estado para su cuidado y desarrollo.
Sin embargo, Olga Sánchez Cordero, durante su participación a distancia en el Foro Divergencia Sexual, en el marco del Día Nacional de la Lucha contra la Homofobia, Lesbofobia, Transfobia y Bifobia, dijo que es indispensable promover el reconocimiento de la identidad de género de todas las personas, incluidas las niñas, los niños y los adolescentes.
“Si una niña, niño o adolescente es trans, es importante que pueda ser reconocida en la sociedad y por el Estado con el nombre y el género que ella o él indique, sin tener que esperar a que cumpla la mayoría de edad”. Lo que quiere decir que la Secretaria de Gobernación de México, está avalando los inhibidores de la pubertad, que son bombas de hormonas que es un gran negocio de las farmacéuticas, que tienen un costo promedio mensual de entre US$200 a US$800 Dólares y que tienen efectos muy perjudiciales para la salud.
“Esto debe ser posible, además, por la vía administrativa, sin necesidad de que haya dictámenes médicos o psicológicos, ni juicios de por medio. La propia Suprema Corte de Justicia de la Nación reconoció en noviembre del último año que la vía administrativa es la vía idónea para realizar el trámite, lo cual es consistente con los estándares dictados por la Corte Interamericana de Derechos Humanos en su Opinión Consultiva OC 24/17”, subrayó.
De igual modo, sugirió a los diputados y senadores sumar esfuerzos para combatir en la ley las llamadas “terapias de conversión” que buscan corregir la orientación sexual e identidad de género.
“La Secretaría a mi cargo, a través del CONAPRED, se ha pronunciado en el pasado contra estas prácticas, que parten de la noción falsa de que la orientación sexual o la identidad de género son enfermedades que requieren de una “cura” y que se pueden cambiar”.
“Estos son actos que podrían incluso configurar malos tratos o penas crueles, inhumanas o degradantes e inclusive tortura. Es indispensable examinar cuál es la mejor manera de erradicar estas prácticas. Actualmente, en el Senado, se discute una iniciativa al respecto que, de llegar a la Cámara de Diputados, probablemente requerirá de su dictamen”.
En el foro organizado por la diputada Celeste Ascencio, presidenta de la Comisión de Juventud y Diversidad Sexual de la Cámara de Diputados. La secretaria Sánchez Cordero sugirió a los legisladores federales “medidas de nivelación” que requieren ser introducidas en la legislación como es el caso de la igualación de las licencias de maternidad y paternidad para lograr la corresponsabilidad en el cuidado independientemente de si las parejas son homosexuales o heterosexuales; la introducción de cuotas de participación en los partidos políticos con base en la orientación sexual y la identidad de género para que la agenda de la comunidad siga presente.
La responsable de la política interior reconoció las vulnerabilidades que enfrentan quienes conforman esta comunidad en el contexto actual, como es la precariedad y exclusión laboral y más recientemente, el riesgo de que, ante la necesidad de permanecer en casa con motivo de la pandemia de coronavirus, hay un riesgo de que aumente la hostilidad o las agresiones hacia jóvenes LGBT con familias que no les aceptan.
En México, el 6% de la población total pertenecen a este colectivo, y no nos explicamos cómo pueden estar impulsando tantas políticas públicas a su favor, cuando las mujeres representamos el 51% de la población y que solamente durante la contingencia se han registrado 10 feminicidios cada día, 115 llamadas de auxilio al 911 cada hora y se han presentado 20,000 denuncias por violencia familiar, a pesar de que el Presidente no lo quiera reconocer.
¿No valdría la pena que se dedicara un mayor esfuerzo de parte de la Secretaria de Gobernación al tema de la violencia contra las mujeres?
Estamos seguras de que las integrantes del gabinete que se encargar de los problemas de las mujeres, no tienen idea del daño que la teoría Queer e identitaria le van a hacer a las mujeres y niñas, reduciéndolas a cuerpos gestantes o cuerpos menstruantes.
La Teoría Queer es una teoría sobre el género que afirma que la orientación sexual y la identidad de género de las personas son el resultado de una construcción social y que, por lo tanto, no existen papeles sexuales esenciales o biológicamente inscritos en la naturaleza humana, sino formas socialmente variables de desempeñar uno o varios papeles sexuales. Lo que significa que no hay diferencias biológicas, sino que todas las diferencias son socialmente construidas y que resulta una teoría que refuerza al neopatriarcado.
Por eso, las feministas abolicionistas nos pronunciamos por la abolición de la prostitución, la pornografía, los vientres de alquiler y el género.
FUENTE: TRIBUNA FEMINISTA