octubre 12, 2018
Pañuelos verdes, mujeres piden a la corte no limitar el aborto
Un grupo de mujeres se manifestó en la plaza de Bolívar contra una ponencia de la Corte Constitucional que podría limitar las semanas en las que se puede interrumpir voluntariamente el embarazo.
El debate sobre el aborto regresó con fuerza al país. Por decisión de la magistrada Cristina Pardo, la Corte Constitucional estudiará la posibilidad de introducir nuevas modificaciones a las posibilidades que tienen las mujeres colombianas de interrumpir voluntariamente el embarazo. La próxima semana se decide una ponencia sobre la creación de nuevas restricciones.
Específicamente lo que está en juego es una decisión sobre si debe haber un límite a la edad gestacional en la que puede interrumpirse el embarazo. El caso que hizo que este debate que parecía resuelto reviviera fue el de una mujer de 26 años que necesitaba acceder a la interrupción voluntaria de su embarazo alegando una de las tres causales, la incompatibilidad del feto con la vida. La mujer no recibió ayuda en el tiempo en el que la solicitó y esto provocó que cayera en depresión.
Después de seis semanas logró conseguir la interrupción a través de un juez con una acción de tutela. Sin embargo, decidió llevar su caso más allá, poniendo en consideración todas las barreras que encontró en el sistema para que le pudieran autorizar el procedimiento. Aunque el propósito de la mujer era que la justicia replanteara las dificultades a las que se debían enfrentar las mujeres, el debate giró hacia la ponencia de Pardo con la que se pondrían nuevos límites al aborto.
Este jueves, mientras se realizaba la primera discusión entre los magistrados de la corte, un grupo de mujeres decidió adelantar un plantón en la plaza de Bolívar contra la ponencia. Consideran que podría generar un retroceso en los derechos de las mujeres que por diferentes razones necesitan poner fin al embarazo.
Las mujeres pidieron a la corte avanzar en la protección del derecho que ellas tiene a decidir. Foto: Diana Rey // SEMANA.
“Esto solo afecta a las mujeres más pobres, a las que están en las zonas rurales las cuales tendrían muchos más inconvenientes”, dijo Cristina Rosera, abogada y manifestante en la jornada. Según ella, las mujeres que buscan ayuda para interrumpir el embarazo de forma segura, lo hacen a tiempo, pero como tienen tantas barreras en el proceso, terminan accediendo a una autorización cuando ya están en un estado muy avanzado de gestación.
“Nos gustaría que la Corte Constitucional tenga en cuenta las barreras que ya existen y más bien se enfoque en eliminar esas barreras para prevenir que hayan más mujeres buscando practicarse abortos clandestinos”, aseguró.
Las manifestantes creen que entre más limitaciones ponga la corte, la vida de las mujeres embarazadas que necesiten optar por un aborto corre más riesgos. Foto: Diana Rey // SEMANA.
Allí, en la plaza de Bolívar, ella y decenas de mujeres con pitos y arengas se reunieron para exigirle a la justicia avanzar en los derechos de las mujeres a decidir. “Educación sexual para decidir, aborto seguro para no morir”, decían los cantos.
Con pañuelos verdes en sus cuellos se plantaron en el corazón de Bogotá para decirle a la justicia que ponerle más límites al aborto en el país es no pensar en los casos de salud púbica en las regiones más apartadas de Colombia en las que las mujeres, que por ejemplo, son visitadas por un ginecólogo cada dos meses o más. Lo que según ellas no permite que se realice a tiempo el diagnóstico médico de las incompatibilidades que pueda tener el feto, por las que ya la legislación permite que se aplique el aborto.
“Todo depende de las condiciones que tenga la mujer para acceder a los servicios de salud. Una mujer que vive en zonas rurales en las que quizá solo hay un puesto de salud, que tenga que desplazarse largo tiempo para llegar y cuando llegue la persona que la atiende no está informada o está en contra del aborto, va a ser más difícil dar el diagnóstico”, explicó.
Las manifestantes exigen que el aborto se realice en las tres causales que se permiten en el país hasta las etapas avanzadas.
“Tenemos el caso de muchas mujeres que estaban deseando quedar embarazas, quedan en embarazo, pero en el transcurso de la gestación se dan cuenta que tiene un cáncer y necesitan acceder a tratamientos para salvar su vida y deben interrumpir el embarazo. No estamos hablando de una caso de un capricho o una irresponsabilidad, estamos hablando de casos en los que es necesario tenerlos abiertos para salvarles la vida”, dijo.
La manifestación fue respaldada por seis organizaciones que trabajan por los derechos sexuales y reproductivos, quienes consideran que si la ponencia de la corte prospera aumentarán los obstáculos para acceder a este derecho.
La Mesa por la Salud y la Vida de las Mujeres, el Centro de Derechos Reproductivos, Profamilia, Católicas por el Derecho a Decidir Colombia, Women’s Link Worldwide y Dejusticia creen que si el tribunal limita las semanas en las que una mujer pueden acceder a la interrupción voluntaria del embarazo, esto pondría en riesgo sus vidas, su salud y aumentaría las barreras existentes que impiden la garantía de este derecho. Pañuelos verdes en la plaza de Bolívar.
FUENTE: SEMANA