abril 3, 2018
Winnie, la mujer de la que Nelson Mandela se arrepintió de haber amado
La polémica expareja del premio nobel de paz, falleció este lunes a los 81 años. Este es un perfil de la mujer que luchó contra el ‘apartheid’ en Sudáfrica. Fue escrito en 2013 cuando a la activista se le reabrió una investigación por homicidio.
Winnie Mandela, exesposa del nobel de paz sudafricano, era para 1990 la figura más visible en la lucha contra el apartheid.
En ese entonces, un hombre llamado Nico Sono que se encontraba en una zona pobre a las afueras de Johannesburgo y que era habitada solamente por gente negra, exclamaba a gran voz que Winnie Mandela había asesinado a su hijo Lolo en 1988.
El periodista John Carlin, quien siguió de cerca todo el caso de Nelson Mandela desde que el líder estaba en prisión, recuerda que Nico Sono le comentó que su hijo de 21 años desapareció el 13 de noviembre de 1988. Además, le dijo que ese fue el último día que lo vio, golpeado en la cara, sangrando y temblando de miedo en una furgoneta en la que viajaban media docena de jóvenes matones bajo el mando de Winnie Mandela. “Según me contó Nico Sono, ella, que también estaba en la furgoneta, se negó a entregarle a su hijo, acusándole —falsamente, como después trascendió— de “traidor” a la causa de la liberación negra”, asegura Carlin.
Según el periodista, el testimonio de Sono representaba la excusa perfecta para detener a la señora Mandela, acusarla de homicidio y desprestigiar el movimiento de liberación que lideraba su esposo. En ese momento las autoridades que tenían el poder en sus manos no hicieron nada al respecto, pero más de 20 años después, la policía sudafricana empezó a investigar el caso.
¿Por qué solo hasta ese momento se retomó el caso?
John Carlin creía que más interesante que entender por qué se retomaba el caso hasta ese momento, lo era el llegar al trasfondo de la causa por la cual no lo investigaron hace 30 años. El periodista aseguró que en aquellos tiempos la justicia estaba al servicio del poder y al poder ya no le interesaba que Nelson Mandela, que llevaba 26 años en la cárcel y desde la distancia amaba a su esposa con locura, sufriera más. “El gobierno blanco sabía que los días del apartheid estaban contados, no querían correr riesgos. Por eso protegieron a la mujer de Mandela de todo el peso de la ley”, aseveró.
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Además de eso, todo indica que el motivo que llevó a reavivar el proceso de Winnie radicaba en que no sostenía buenas relaciones con el entonces presidente de Sudáfrica, Jacob Zuma. En 2012 el Congreso Nacional Africano se reunió para determinar la permanencia de Zuma como líder del partido, la mujer se mostró en contra de su jefatura y abiertamente formó parte de la oposición. Tres meses después, en algo que aún no se sabe si fue casualidad o planeado, se encontró el cuerpo de Lolo Sono.
“Lo cierto es que si ella no fuera quien es, si no hubiera estado casada con Nelson Mandela, si no hubiera cometido los crímenes que cometió cuando los cometió, hubiera pasado muchos años de su vida en prisión”, asegura Carlin.
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Y es que aunque en su momento un juez la declaró culpable del secuestro de cuatro jóvenes, de complicidad en posteriores agresiones contra ellos y la condenó a seis años de cárcel, luego Winnie apeló y terminó pagando una multa insignificante. Desde ese momento no se había vuelto a mencionar su nombre, aunque el mundo estaba lleno de especulaciones en las que se asegura que era una asesina y que ella y su banda de jóvenes matones lanzaron lo que muchos llamaban el “reino de terror de los chicos de Winnie”.
La decepción
Tan duro fue el rompimiento entre los esposos, que el premio nobel de paz el día de su divorcio llegó a decir: “Si el universo entero intentara convencerme de que me reconciliara con ella, no lo haría” y nunca lo hizo.
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Winnie Mandela fue la segunda esposa del nobel de paz y falleció hoy a sus 81 años en el Hospital Netcare Milpark de Johannesburgo, Sudáfrica. El portavoz de la familia aseguró que la mujer falleció luego de “una de una larga enfermedad, que la tenía entrando y saliendo del hospital desde el inicio del año”. El matrimonio de la pareja duró 38 años y estuvo rodeado de los más grandes momentos políticos de la época, activismo, resistencia y lucha en contra de la discriminación racial sobre las personas negras en Sudáfrica.
Sin embargo, la controversial vida de la política, quien fue acusada de secuestro y asesinato, y un escándalo de adulterio terminaron con la unión en 1996. La lucha de la mujer continuó y entre 2007 y 2009 hizo parte de Congreso Nacional Africano (ANC), por sus siglas en inglés, pero su deseo por estar en el poder ya no estaba allí. Hoy, el mundo despide a una mujer polémica, rebelde y activista política, luchadora por los derechos de las personas negras y cuestionada por la violación de los mismos.