agosto 29, 2025
La mexicana Lizbeth Ovalle se convierte en el fichaje más caro del fútbol femenino

Las palabras «magia» y «golazo» se han convertido casi en sinónimos de Lizbeth Ovalle, la delantera mexicana de 25 años que hace unos días se convirtió en el fichaje más caro de la historia del fútbol femenino, después de que el Orlando Pride, último campeón de la liga estadounidense y casa de grandes jugadoras como la brasileña Marta, decidiera pagar 1,5 millones de dólares al club Tigres del país azteca.
Llamada La Maga, precisamente por su estilo de juego, su habilidad con el balón y su definición, Ovalle llega a Orlando con un recorrido lleno de récords. Es la máxima goleadora de Tigres, el equipo más ganador de México, con 136 tantos en ocho temporadas en las que ganó seis títulos de liga y tres trofeos de Campeón de Campeonas.
En lo que va del año, la delantera ha disputado 23 partidos en los torneos locales, en los que ha anotado trece goles, incluido uno llamado «Camaroncín», por la manera en la que definió tras un centro de la española Jenni Hermoso. El tanto dio la vuelta al mundo.
Con la selección mexicana, Jacquie Ovalle, como también le dicen de cariño en su país, ha jugado 81 partidos, anotando 20 goles.
El traspaso de Lizbeth Ovalle al Orlando Pride
Con el traspaso millonario, Ovalle se pone a la cabeza de una no tan larga lista de los que han sido denominados en los últimos años como los fichajes más caros en la historia del fútbol femenil, y en la que hay varias latinoamericanas.
Antes que ella, la atacante canadiense Olivia Smith, de 20 años, ocupaba el primer lugar. El Arsenal inglés pagó por ella en julio un millón de libras, que equivale a 1,3 millones de dólares (1,15 millones de euros) al Liverpool; y a inicios de año la estadounidense Naomi Girma llegó al Chelsea por 883.000 libras o 1,1 millones de dólares. La defensa, que provenía del San Diego Wave, de California, se convertía así en la primera jugadora millonaria del fútbol femenino.
Las brasileñas Tarciane y Priscila y la colombiana Mayra Ramírez también fueron consideradas como los traspasos más caros en 2024 e inicios de 2025 cuando llegaron al Lyon francés, al América mexicano y al Chelsea inglés, respectivamente.
«Esto abre camino no solo para mi generación, sino para las futuras generaciones que vienen dando pasos pequeños, pero creo que van a ir avanzando de una manera muy grande y con un gran nivel», señaló la jugadora en una entrevista que le hizo Tigres por su despedida.

«Se siente bonito que niñas te admiren»
Pero el camino de Ovalle no ha sido fácil, especialmente en un mundo muy masculinizado en el que hace una década era impensable que hubiera una liga femenina.
«Yo a lo máximo que aspiraba en el fútbol femenil en México era a una beca universitaria y el que se abra la liga para mi fue algo que representó muchísimo. Yo jamás imaginé que se podría abrir una liga en México y menos que tuviera este impacto y dimensión que tiene», señaló.
Y es que ella viajó desde su natal Aguascalientes, una ciudad en el centro del país, hasta Monterrey, en el norte, para estudiar en la Universidad Autónoma de Nuevo León cuando al poco tiempo pudo unirse a Tigres.
Ovalle aseguró en otra entrevista que le realizó la selección mexicana hace un año que nunca se imaginó que pudiera convertirse en una referente para niñas que tienen el mismo sueño que ella.
«Se siente bonito que niñas así tan chiquitas te admiren y que vean tus partidos porque cuando yo estaba chiquita era difícil pensar algo así», relató.
La futbolista recordó que para ella fue muy difícil llegar hasta donde está ahora porque vivió muchos tropiezos y fue víctima de malas actitudes por parte de niños e incluso de sus padres, lo que la llevó en algún momento a pensar en que el fútbol no era para ella.
«Jugaba un partido y los papás de los rivales decían: ‘Quiébrenla’ o ‘¿Cómo te va a ganar una niña?’, ‘Llégale fuerte, no importa'», mencionó.
Sin embargo, su padre le dijo que los papás de los otros niños estaban enojados porque ella jugaba muchísimo mejor y les anotaba goles. Creció un poco más y fue a la selección de su estado y posteriormente a la mexicana.
El último partido que La Maga Ovalle disputó en el estadio de Tigres fue el pasado 22 de agosto, en el denominado Duelo de Estrellas de la Liga MX Femenil ante el FC Barcelona, encuentro en el que se despidió de la afición que la vio crecer hasta hacer historia en el fútbol.
FUENTE: EFEMINISTA