noviembre 14, 2018
El 11 de abril del 2002, minuto a minuto
Entrega uno de la serie documental “Somos más que 11” y del libro “El caso de la Asamblea del Valle: tragedia y reconciliación”
“Bueno, señoras y señores nosotros somos las FARC, nos los llevamos del centro de Cali”. Es lo que dijo alias J.J. cuando notificó a 17 personas de la Asamblea del Valle (entre diputados
y asistentes) que estaban secuestradas. Mientras tanto, un guerrillero grababa el episodio. En las imágenes se pueden observar los rostros de sorpresa, indignación y angustia de quienes bajo engaño se subieron a una buseta blanca buscando la protección del Ejército frente a una supuesta amenaza de bomba en el edificio San Luis.
Ya habían acordado que a las sesiones de la Asamblea debían asistir todos los diputados “yo había desempolvado una ordenanza que decía que si cuando empezara la sesión no estaban los diputados, no se les pagaba el día, por lo tanto, nadie faltaba” (CNMH, entrevista al exdiputado Luis Herrera, 2017, 22 de mayo). Sin embargo, ese jueves 11 de abril, Juan Carlos Narváez, entonces presidente de la Asamblea, llevaba más de una hora esperando en el salón de sesiones a que llegaran los diputados para iniciar el debate de la Comisión de Asuntos Económicos y Fiscales.
Mientras esperaban a los diputados faltantes “entraron al recinto unos soldados y nos dijeron desalojen lo más pronto posible que hay una bomba. Una persona alta, que se supone que es el comandante, se dirigió al presidente de la Asamblea y le dijo -tranquilos diputados, nosotros tenemos un carro afuera para protegerlos-” (Juzgado 3 Penal del Circuito, Cali, 2002, declaración auxiliar de grabación, C:1, folio 125). Los supuestos soldados hacían parte de un comando de 18 guerrilleros que ingresó a las 10:15 a la Asamblea por la puerta principal. El equipo de vigilancia del edificio se encontraba en cambio de turno cuando fue sorprendido por la tropa, así lo recuerda uno de los vigilantes “se paró uno al frente y me dijo vamos a ingresar porque hay una bomba al interior del edificio” (Juzgado 3 Penal del Circuito, Cali, 2002, declaración vigilante, C: 1, folio 129).
El comando guerrillero no se dirigió en su totalidad al salón de sesiones. Un segundo grupo se quedó en la plazoleta del primer piso simulando la búsqueda de explosivos y anunciando la evacuación a los empleados de la Asamblea. Uno de los empleados observó “que, en la parte de abajo, alrededor de la pileta, había varios uniformados. Yo bajé y seguí a algunos de ellos que corrían hacia la parte por donde se sacan las basuras y al llegar hasta allí gritaban ¡aquí está la bomba!, señalando la caneca de basura grande” (Juzgado 3 Penal del Circuito, Cali, 2002, declaración asesor de la Asamblea, C: 1, folio 18).
En el video grabado por las FARC se revive el anuncio de evacuación realizado por este segundo grupo de guerrilleros que con megáfono alertaban: “Somos la unidad antiexplosivos del Batallón Primero Numancia. Por favor, damas y caballeros, desalojen los edificios para así mismo desactivar las bombas. Tomemos la dirección hacia el parque de la Gobernación. Para los diputados hay un vehículo especial” (FARC-EP, 2002). Las imágenes fueron grabadas por dos guerrilleros vestidos de civil con un chaleco de Telepacífico. Los supuestos periodistas lograron captar los momentos de pánico vividos por las personas que se encontraban al interior del edificio de la Asamblea.
En la planeación de la acción, se pensó que la zozobra generada en el primer piso debía acentuarse con las acciones de un tercer grupo de guerrilleros que debía dirigirse al segundo piso de la Asamblea. Este grupo tenía la misión de instalar en los baños una carga de pólvora negra que al explotar incrementaría la situación de pánico. Gustavo Arbeláez Cardona, antiguo jefe del Frente Urbano Manuel Cepeda Vargas, conocido como Santiago, recuerda la maniobra: “Dentro de lo que nosotros pensamos para darle más realismo al hecho es que llevamos unas cargas de pólvora negra para colocar en el baño. Eso solo hace bulla, eso no tiene capacidad de reventar” (CNMH, entrevista a Gustavo Arbeláez Cardona, 2017, 17 de noviembre).
FUENTE: CENTRO DE MEMORIA HISTÓRICA